ECONOMÍA
11 de noviembre de 2024
"Seguimos teniendo a China como segundo socio comercial"
Sergio Spadone, titular de la Cámara Argentina-China de Producción, Industria y Comercio, analizó la relación comercial entre ambos países.
La semana pasada, el Secretario de Coordinación de Producción del Ministerio de Economía de la Nación, Juan Pazo, visitó la República Popular China donde mantuvo diferentes encuentros con autoridades gubernamentales, empresas y grandes inversores en el marco del fortalecimiento de la relación comercial bilateral entre Argentina y China. Durante las reuniones de trabajo se dialogó sobre el impacto del Régimen de Incentivos para las Grandes Inversiones (RIGI) y la proyección de nuevas inversiones en sectores estratégicos de la economía argentina.
La relación entre Argentina y China
Sin dejar de proclamar su alineamiento con Estados Unidos, el presidente Javier Milei dio un giro en su discurso respecto de China, en busca de inversiones y reservas para reactivar una economía en recesión. “No voy a hacer negocios con China. No voy a hacer negocios con ningún comunista”, decía hace un año, cuando se encaminaba a la presidencia de Argentina.
Para Sergio Spadone, presidente de la Cámara Argentina-China de Producción, Industria y Comercio, esto no cambió mucho. "Nosotros seguimos teniendo a China como segundo socio comercial. Es quien compra la mayor cantidad de commodities que produce el agro y se incrementó mucha la exportación de carne a China, tras haber logrado la firma del protocolo sanitario para que la carne pueda ingresar a ese país. Todo lo que sea alimentación con trazabilidad, China va a estar siempre interesada".
¿Preocupa la vuelta del proteccionismo de Trump?
Donald Trump impulsaría en su segundo mandato una serie de medidas proteccionistas que podrían repercutir negativamente en el negocio de los biocombustibles, aunque de manera positiva si una eventual guerra comercial con China obliga a los asiáticos a aumentar las importaciones desde Sudamérica.
"No sé cómo podría influir una restricción de los commodities. Estados Unidos tiene también una balanza comercial deficitaria muy grande con China, porque no solo compra bienes de consumo, sino que las mismas empresas norteamericanas tienen sus fábricas instaladas en China y producen para todo el mundo. Cualquier restricción entre China y EEUU nos favorece porque abre un nuevo mercado", explicó Spadone.